Uno de los dilemas más comunes al comprar una propiedad es decidir cómo pagarla. Ambas opciones tienen ventajas y puntos a considerar, dependiendo de tu situación financiera y tus objetivos a largo plazo.

1. Pago de contado: libertad y rapidez

Ventajas:

  • Evitas intereses y pagos mensuales

  • Tienes control total sobre tu propiedad

  • El proceso de escrituración es más rápido y directo

Desventajas:

  • Requiere un gran capital disponible

  • Puedes quedarte sin liquidez si usas todos tus ahorros

2. Crédito hipotecario: financiamiento a largo plazo

Ventajas:

  • Permite comprar sin tener el dinero completo

  • Mantienes capital disponible para otros proyectos o emergencias

  • Puedes aprovechar tasas competitivas y plazos amplios

Desventajas:

  • Pagas intereses a lo largo del tiempo

  • El proceso es más lento por la aprobación bancaria

  • Debes cumplir con requisitos como ingresos comprobables y buen historial crediticio

¿Qué es mejor para ti?

Todo depende de tu situación económica. Si tienes el dinero completo y no comprometes tu estabilidad, el contado puede ser ideal. Si prefieres conservar tu liquidez y pagar a plazos, un crédito bien planeado es una excelente opción.